Debido a su historia milenaria, China ha acumulado un amplio catálogo de normas (explícitas e implícitas) que rigen los hábitos sociales: la llamada etiqueta china (o 礼节).
En el pasado, casi todos los aspectos de la vida de los chinos se regían por lo que el maestro Confucio llamaba 礼 (“ellos”, los ritos); incumplir uno de esos ritos equivalía a romper el código ético confuciano que, a veces, traía consecuencias importantes.
Con el avance de la globalización y la modernidad, el peso dado al cumplimiento de estas normas rituales ha ido disminuyendo, pero no se ha perdido del todo. La pérdida de muchos de los ritos tradicionales se apoya en el hecho de que los chinos no esperan que los extranjeros los conozcan. Por esa razón, suele bastar con ser respetuoso y seguir las ru xiang sui su (入乡随俗) o «costumbres locales».
Cómo saludar
En general, cuando conoces a alguien, lo mejor es comportarse de manera formal y con mucha humildad, pues se considera una de las mayores virtudes. La forma tradicional de saludar a alguien consistía en inclinarse escondiendo las manos en las mangas de la ropa.
Esta forma se conoce como 作揖 (Zuoyi) y ha caído en desuso, siendo sustituida por el apretón de manos, mucho más «occidental». En la antigüedad, se prefería el famoso 叩头 (ketou), es decir, arrodillarse y bajar la cabeza hasta tocar el suelo en señal de profunda reverencia y gran respeto hacia los superiores.
El Ketou (o kowtow), como práctica que recuerda a la China feudal y arcaica, fue uno de los primeros en desaparecer del catálogo de los famosos fanwen rujie (繁文缛节), es decir, todos los ritos y la etiqueta «culturalmente complicados» que se han retirado en el largo proceso de modernización de China.
Cómo presentarse
Como regla general, los chinos prefieren esperar a ser presentados por alguien de su propio grupo o que conozcan. Presentarse uno mismo no se considera ni apropiado ni de buena educación. Casi todo el mundo a día de hoy conoce la práctica de las tarjetas de visita. Deben darse y recibirse con ambas manos, con una ligera inclinación de cabeza en señal de respeto. Además, es importante leer atentamente la tarjeta antes de guardarla en el bolsillo.
Relaciones sociales: el guanxi
Un aspecto muy importante de la etiqueta china que tiene que ver con las relaciones sociales es el guanxi (关系), existente en China desde tiempos antiguos. Una traducción más apropiada de este término sería «recomendaciones/conexiones». El Guanxi es un aspecto central de la vida en China y los que se nieguen a seguir sus reglas no tendrán mucha esperanza de tener éxito en el país. Es necesario aclarar las expresiones relativas al Guanxi:
- El guanxi (拉关系): «tratar de establecer relaciones con alguien»;
- Kao guanxi (靠关系): “depender de conexiones”;
- Qundai guanxi (裙带关系): “depender de conexiones familiares”.
El guanxi en China es tan importante que, recientemente, ha surgido una rama de estudio llamada precisamente guanxixie (关系学, que podría traducirse como «guanxilogía») que analiza esas conexiones o relaciones sociales tan importantes en China. Esta guanxilogía puede resumirse en las siguientes palabras:
- Tuo (托 ): “confiar una tarea a uno de tus contactos”;
- Pan (攀): “subir peldaños en la escalera de las relaciones sociales”;
- Tao (套): “ganarse el favor de alguien”;
- Zuo (做): “hacer favores”;
- Pei (培): “cultivar las propias relaciones sociales”;
- Chuan (串) “conectar a distintas personas”;
- Xi (袭)“: heredar el guanxi de algún miembro de la familia, de profesores o de jefes”.
El tema de la «cara”: el mianzi
Otro de los aspectos relativos a la etiqueta china es el relativo a la «cara”, el mianzi (面子). La “cara” es similar a la idea occidental de la reputación: un metro que mide el estatus social de una persona. «Tener la cara”, you mianzi (有面子), significa ser respetado por tus semejantes.
Para los occidentales es difícil comprender por qué se le da tanta relevancia a «la cara» en China, donde a veces es más importante que la propia vida. Allí, uno siempre debe proteger su propia «cara» pero también debe encargarse de preservar la «cara» de los demás.
«Perder la cara”, diu mianzi (丢面子), es una de las peores cosas que puede sucederle a un chino. Para evitar esa «pérdida” es aconsejable no insultar, regañar o criticar a otros en público. La crítica, aunque sea constructiva, debe hacerse en privado y de forma calmada.
La comunicación
La etiqueta china también incluye la comunicación, pues conversar en China puede ser muy confuso. Los chinos rara vez expresan lo que piensan directamente, prefieren dar rodeos.
El problema es que, a veces, esto puede resultar bastante confuso, haciendo que la conversación se vuelva complicada. Los chinos piensan que un «no» directo como respuesta a una pregunta puede ser fuente de vergüenza para las dos partes implicadas. Por ese motivo, tratan de evitar las respuestas directas en todos los aspectos, prefiriendo a veces permanecer en silencio.
En China existen el «sí» y el «no», respectivamente shi (是) y bu (不), pero se utilizan con poca frecuencia. Por ejemplo, en lugar de decir un «no» directo, un chino preferirá decir keneng you xie xiao wenti (可能有些小问题), o «puede que haya algún problema» o wo kaolu kaolu (我考虑考虑), «lo pensaré».
Otra peculiaridad de la etiqueta china en lo referente a sus métodos de comunicación es que para los chinos, es perfectamente normal responder al teléfono en medio de una conversación o una reunión, o en el cine. Los chinos usan el correo electrónico, pero aún no tienen costumbre de comprobar a diario los mensajes de la bandeja de entrada. Por tanto, nunca se debe esperar una pronta respuesta a un correo electrónico.
Los regalos
“Cuando te ofrezcan un regalo, es que quieren pedirte un favor” (li xia yu ren, jiang you suo qiu, 礼下于人,将有所求 ). Este proverbio resume muy bien el uso que se hace de los regalos en China.
Siempre que se hace un regalo, ya sea grande o pequeño, caro o barato, se espera que sea correspondido. Cuando te invitan a cenar o a la hora de hablar de cuestiones oficiales o negocios, es necesario llevar un regalo.
Los regalos, por tradición, no se abren cuando se reciben. El que ha recibido el regalo esperará a que la persona que se lo ha dado se despida. Esto se hace para evitar la hipotética vergüenza en caso de que el regalo no sea bien recibido. Sin embargo, puede suceder que quien trajo el regalo insista con un dakai kan yi xia (打开看一下) para que el destinatario lo abra.
Por desgracia, en China hay que ser muy cuidadoso a la hora de hacer un regalo, porque la elección no debe hacerse al azar (suibian, 随便), ya que hay gran cantidad de regalos que son tabú. ¿De qué objetos se trata? Lo creas o no, su fonética es la que provoca que se consideren de mal gusto.
Los relojes, por ejemplo, están entre los objetos de «mal agüero», porque la expresión china «regalar un reloj», o song zhong (送钟) suena como «asistir a un funeral» (song zhong, 送终). Los abanicos shan (扇) y los paraguas san (伞) tienen una pronunciación similar a «separarse» (san, 散).
Para obtener más información sobre los regalos en un contexto más orientado a los negocios en China, lee este artículo.
Pero entonces, ¿qué está bien visto regalar en China?
Los chinos aprecian mucho los productos y especialidades locales de un sitio que se haya visitado o del lugar de origen de una persona (galletas, cigarrillos, ropa) y les encanta recibir fruta fresca. Si tratas de conseguir los favores de un hombre poderoso, lo ideal es regalarle algo a su esposa (pañuelos de seda o joyas, por ejemplo).
Cuando se visita la casa de alguien (especialmente en las zonas rurales de China), es ideal regalar algo que sirva para la casa (aceite de cocina, por ejemplo).
¡Cuidado! Los regalos se rechazan un par de veces por norma antes de ser aceptados. Si lo rechazan más de tres veces seguidas es mejor no insistir…
Cuando vayamos a regalar algo, lo ideal es quitarle importancia a nuestro regalo con expresiones del tipo «es solo un detalle» (bu cheng jing yi, 不成敬意); por el contrario, cuando seamos nosotros quienes recibamos un regalo, lo ideal es decir una frase como: ci deng hou li (此等厚礼), o «Es muy generoso por su parte».
Pero recuerda, evita siempre el número 4 (si, 四), homófono de «muerte» (si, 死). Sin embargo, el número 8 (ba, 八) está muy bien considerado porque en cantonés es un homófono de fa (發), «tener éxito».
En resumen, los chinos creen mucho en la homofonía de las palabras, por ejemplo, nunca hablarán de «libros» mientras juegan a las cartas, pues «libro» es homófono de «perder», y así sucesivamente.
La etiqueta en la mesa
Este tema se ha tratado ya en un artículo anterior; clica aquí para más información.
El significado de los colores
Por último, los colores juegan un papel fundamental en la cultura china y hay muchas supersticiones y tradiciones en torno a ellos.
Es conveniente prestar atención a los colores a la hora de vestir. El blanco representa la muerte y es el color tradicional que se usa en los funerales; el rojo es sinónimo de buena fortuna, así como un símbolo de felicidad; el negro es la unión del Yin y el Yang, y en la antigüedad fue considerado el color más importante; el amarillo se consideraba tradicionalmente el color más hermoso, símbolo de los cinco emperadores legendarios. Sin embargo, en la actualidad, es el color que indica la pornografía, por lo que se tiende a «evitarlo».
Photo Credits: Masks by Ashley Wang